Los domingos a la noche son lo peor.
Cuando estas bien, son medio bajón
Cuando estas en una de estas épocas son simplemente lapidarios
Son esas herencias que te quedan de la escuela primaria (siete de la tarde ya estabas masticando el lunes a la matina).
Los domingos son días para tener sexo hasta quedar dormido, fumar marihuana hasta quedar dormido, tomar ansiolíticos hasta quedar dormidos, o simplemente quedarse dormido.
La otra es pegarle por el lado de la cola, asumir el bajón, hacerse carne del dolor. Te tiras al enemigo con una granada en la mano y te inmolas. Te lees un cuento bien abajo de Chejov, escuchas tangos, reflexionas sobre lo que nunca vas a volver a vivir, chateas con alguna ex novia.
Como buen masoquista soy de esta última sub especie. Que bien y que mal me hace estar en el pozo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
cuando no tenés partner para el sexo, ni ansiolíticos, ni marihuana, ni sueño, recomiendo salir de tu casa cuando todavía es de día y volver sólo cuando estás muy cansado y en lo posible después de las 12 de la noche (ya es lunes).
En verano, si no, conseguir una pileta y quedarte, también, hasta pasado el atardecer. La onda es distraer al reloj, real y biológico.
Las calles de capital son siempre una buena distracción.
Publicar un comentario